La bendición de los hijos a pesar de las separaciones
Los niños son una bendición. Bendición sacrificada y generosa que te obliga a cuestionarte todo y remover tu vida en torno a la de tu hijo. En la Biblia se cuenta cómo los hijos son una bendición y cómo una vida sin ellos es una maldición. En un mundo tan acomodado como el que vivimos, donde la comodidad es el mayor de los lujos tener hijos puede verse como una barrera hacia una vida de éxito personal, tiempo libre y disfrute. Sin embargo revisar las creencias que esta sociedad nos vende es fundamental.
¿Tienen sentido las propuestas sociales en detrimento de la familia? ¿Tiene sentido una vida egocéntrica en busca del placer sensual? Las filosofías y religiones nos indican que no. Volver a los valores más fundamentales es imprescindible: sencillez, generosidad, perdón, sacrificio, entrega, reflexión, naturaleza, compartir...etc.
A menudo en las familias desestructuradas tener hijos es una carga pues ya no hay un equipo que sostenga la idea de familia y sea la base que de sentido a la crianza. Ese equipo que a priori eran la mamá y el papá se separan, recordemos que el número de separaciones es de media 7 de cada 10 uniones, y ahora ya no hay equipo ni persiste la idea original con la que se concibieron esos niños así que toca reconstruir la idea y el equipo que de solidez y sentido a la educación y a la nueva familia.
Imaginemos la nueva realidad para los hijos lo dura que es. Y comprendemos la dura realidad para la pareja, sobre todo la abandonada y vilipendiada.
Los hijos son una bendición para toda la vida, compañeros de viaje que dan sentido al día a día . Donde nos reímos a través de sus risas, y nos congratulamos con cada pequeña conquista suya. También sufrimos y llevamos cargas que muchas veces nos superan pero recuerden que el sacrificio va unido a la felicidad, sin uno no está e otro. Nadie nos cuenta esto así podemos estar viviendo situaciones pesadas, injustas o difíciles sin recordarnos que forman parte de las diferentes etapas de la vida y que les ocurren a todos y son lo en el fondo lo que da sentido , dirección y propósito a cada vida.
Salir del victimismo es imprescindible, es una gran monstruo que inutiliza tu vida y da un terrible ejemplo a tus hijos. Tus hijos son una bendición. Los hijos son una bendición y puedes convertir el día a día en una gran gracia. No por lo bonito sino también por la entrega en lo no bonito y tu lealtad hacia ellos más allá de lo que te ocurra.
Toca la Neo escuela, la nueva escuela dentro de un nuevo mundo que amanece después de esta pandemia con Neo familias que se unen y cobran sentido con alegría, propósito y bondad.
Foto de Zoltan Tasi en Unplash. POST DE: Sonia Mohedano.
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